Los Salmos son una colección de poemas y himnos sagrados que se encuentran en el corazón de la Biblia.
Estas composiciones líricas, que han sido recitadas y cantadas por generaciones de fieles a lo largo de los siglos, expresan una amplia gama de emociones humanas: desde el júbilo y la alabanza hasta el lamento y la súplica.
Originados en el contexto del antiguo Israel, reflejan la relación profunda y, a veces, compleja entre el hombre y Dios.
A lo largo de sus versos, se puede apreciar una rica tapezaña de imágenes, metáforas y lenguaje poético que busca trascender la experiencia cotidiana y conectar al ser humano con lo divino.
No solo son una ventana al alma religiosa de un pueblo, sino también una invitación perenne a la reflexión y al encuentro espiritual.